Estrategia curricular de educación ambiental en la formación del Ingeniero Agrónomo desde la asignatura Ciencias del Suelo


Autores:     M. Sc. Anaisa Bauzá Díaz1. anaisabd@ult.edu.cu

                    M. Sc. Luritza Margarita Peña Molina2. luritzapm@ult.edu.cu

                    M. Sc. Reina Estela Peña Peña3. reinapp@ult.edu.cu

                    M. Sc. Enrique Torres Almanza4. enriquetl@ult.edu.cu

                           1,2,3,4  Centro Universitario Municipal Puerto Padre, Las Tunas, Cuba.

RESUMEN: El proceso de formación inicial del Ingeniero Agrónomo, como etapa de apropiación de conocimientos, habilidades y valores, constituye un espacio idóneo para desarrollar en el futuro profesional modos de actuación a favor del cuidado y preservación del medio ambiente. Con la instrumentación de la Estrategia curricular de Educación ambiental en los planes de estudio de esta carrera, se establecen las pautas para el logro de tal propósito. Sin embargo, el estudio exploratorio realizado y la aplicación de diversos métodos de investigación evidencian que aún existen insuficiencias en su cumplimiento, pues esta no es abordada desde todas las disciplinas de formación básica específicas y sus salidas. El presente trabajo tiene como objetivo exponer las acciones desarrolladas para la educación ambiental de los futuros ingenieros agrónomos, a partir de las potencialidades que ofrecen los contenidos de la asignatura Ciencias del Suelo; las cuales se concibieron desde la clase encuentro, la clase práctica y la Cátedra de Medio Ambiente de la institución. El tratamiento de la estrategia curricular de Educación Ambiental desarrollada desde las clases, las actividades de la Cátedra de Medio Ambiente, permitieron alcanzar cambios significativos en cuanto a la actuación, comportamiento y cuidado del medio ambiente por parte de los estudiantes, al determinar los problemas ambientales y sus causas, las medidas para mitigar sus efectos; y se relaciona la educación ambiental con la obra martiana y el pensamiento de Fidel, al reconocer el conocimiento profundo que tenían ambos acerca de la naturaleza y su importancia para proteger el medio ambiente.

Palabras Claves: estrategia curricular; educación ambiental; ingeniero agrónomo; ciencias del suelo.ABSTRACT: The initial training process of the Agronomist Engineer, as a stage of appropriation of knowledge, skills and values, constitutes an ideal space to develop in the future professional ways of acting in favor of the care and preservation of the environment. With the implementation of the Curricular Strategy of Environmental Education in the study plans of this career, the guidelines are established for the achievement of this purpose. However, the exploratory study carried out and the application of the methods of analysis and synthesis, induction deduction, among others, and research techniques such as observation, diagnosis, survey, which show that there are shortcomings in its compliance, since it does not it is approached from the different disciplines and their outputs. That is why the present work aims to strengthen the Environmental Education of Agronomy students from the potential offered by the contents of Soil Sciences, to train an agronomist with a broad profile. The curricular strategy developed from the class and the activities of the Environment Chair allowed significant changes in terms of performance, behavior and care of the environment by students, by determining environmental problems and their causes, as well as the measures to mitigate its effects, environmental education is related to Marti’s work and Fidel’s thought, recognizing the deep knowledge that both had about nature and its importance to protect the environment.Key words: environmental education, environment, agricultural engineer, management of soil and water resources.INTRODUCCION

En la Conferencia inaugural del 8vo Congreso Internacional de Educación Superior “Universidad 2012”, el entonces Ministro de Educación Superior, Díaz – Canell (2012), reconoce que: “Lo decisivo será cuán pertrechados estén los egresados universitarios de una ética, de una conciencia económica, de una conciencia medioambiental y de un pensamiento crítico y creativo para vivir y aportar al desarrollo sostenible en esa nueva sociedad…”  De estas palabras se infiere la necesaria formación integral de los egresados universitarios, considerada una de las concepciones actuales de la universidad como institución social, en consonancia con las exigencias del Plan de estudio E y como resultado del proceso de gestión de la calidad y validación de este.

En este empeño, las Estrategias curriculares adquieren singular importancia, pues incorporan un nuevo aspecto a la visión de las características del proceso de formación. Este concepto, denominado también por algunos autores ejes o temas transversales u objetivos formativos; expresa una cualidad igualmente necesaria al concebir el plan de estudio de una carrera universitaria, y está relacionado con aquellos objetivos generales que no es posible alcanzar, con el nivel de profundidad y dominio requeridos, desde el contenido de una sola disciplina y demandan el concurso adicional de las restantes.

Si tenemos en cuenta que el planeta se enfrenta hoy a una crisis ambiental, lo que contribuye a que los ecosistemas sean cada vez más vulnerables por la cantidad de problemas que acumulan y que los recursos naturales, en deterioro progresivo, es cada vez más un factor limitante del desarrollo, se hace necesario utilizar herramientas de gestión como las estrategias que faciliten trabajar por el desarrollo sostenible. En este sentido el suelo cumple un rol fundamental en la producción sostenible de alimentos, sobre todo en el escenario actual derivado del cambio climático.

Se estima que la demanda de una población creciente sobre el suelo aumentará un 60% para el 2050 (FAO, 2015). Estas presiones, combinadas con usos y prácticas de gestión no sostenibles, así como los fenómenos climáticos extremos, causan una degradación importante del suelo. Es por ello que uno de los objetivos de la política económica y social del Estado cubano es lograr la elevación del nivel de vida de la población, lo que se conjuga con la necesaria formación de valores éticos y políticos de sus ciudadanos. Como vía para cumplir este objetivo, el Estado enfoca su accionar sobre la base de lineamientos de trabajo. Uno de ellos, es el de enfatizar el fomento de la educación ambiental, la que se fundamenta en la idea de que a través de ella es posible dar un tratamiento diferenciado al ambiente y las investigaciones en ese campo, tomando en consideración el desarrollo sostenible, el enfrentamiento al cambio climático y la conservación y uso racional de los recursos naturales, como son los suelos, el agua, las playas, la atmósfera, los bosques y la biodiversidad.

Es así que en el VII Congreso del Partido Comunista de Cuba se aprueba el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta 2030: Propuesta de Visión de la Nación, Ejes y Sectores Estratégicos, entre los que se identifica el Eje Estratégico «Recursos naturales y medio ambiente». El mismo, es portador del contenido cualitativo de las transformaciones que demanda la situación actual para alcanzar las metas propuestas, lo cual constituye la fuerza motriz que permite estructurar y concretar estrategias que conduzcan al desarrollo.

En este contexto se ha tomado conciencia que los recursos naturales, en deterioro progresivo, es cada vez más un factor limitante del desarrollo, por lo que resulta impostergable enfrentar el reto. De todo lo anterior se deduce la necesidad de utilizar herramientas de gestión como las estrategias que faciliten trabajar por el desarrollo sostenible. El suelo en este sentido cumple un rol fundamental en la producción sostenible de alimentos, sobre todo en el escenario actual derivado del cambio climático. Su papel en la captura de carbono, en la eficiencia en el uso del agua, en la provisión de nutrientes y como lugar de interacción de las plantas con los microorganismos del suelo lo convierten en un elemento esencial a la hora de pensar en el futuro de la agricultura, del hombre y del planeta que habitamos.

Según Expósito, Barban y Puentes (2012), citado por Hernández, Triana (2014) la educación ambiental deberá estar encaminada a concientizar, sensibilizar, promover valores, conocer, analizar y realizar acciones relacionadas con el cuidado y mejoramiento del medioambiente y estará dirigida, desde el punto de vista  de las conductas, a lograr cambios de hábitos y la resolución de problemas de forma individual y colectiva, y aportar, además, a la visión sintetizadora para la comprensión e interpretación de la interacción naturaleza – sociedad, que propicie una calidad de vida decorosa y equitativa, así como el tránsito hacia niveles de desarrollo sostenibles.

Ante este reto las carreras de ingeniería, tienen la imperiosa necesidad de formar a los estudiantes a través de todos los programas de estudio que reciben de las diferentes disciplinas, con un enfoque profesionalizado. Entre las carreras de estas ramas que posee gran importancia para el país, se encuentra la Ingeniería agrónoma.

Los resultados alcanzados en el proceso de enseñanza aprendizaje de las asignaturas de formación básica específicas de la especialidad de Agronomía en el Centro Universitario de Puerto Padre permitieron constar en la práctica la existencia de insuficiencias, entre las que se identifican:

  • Escasos conocimientos acerca de los principales problemas ambientales existentes en el mundo, el país y la localidad.
  • Desconocimiento de las medidas a tomar para preservar el Medio Ambiente.
  • Predominio del trabajo por el profesor en la instrucción y no en lo educativo, en las disciplinas y asignaturas que conforman los planes de estudio.
  • Los contenidos abordados en los diferentes temas en pocas ocasiones logran la vinculación real con el cuidado del medio ambiente para una adecuada formación en el estudiante.

Por lo anteriormente expuesto nuestro trabajo tiene como objetivo exponer las acciones desarrolladas para la educación ambiental de los futuros ingenieros agrónomos, a partir de las potencialidades que ofrecen los contenidos de la asignatura Ciencias del Suelo; las cuales se concibieron desde la clase encuentro y la Cátedra de Medio Ambiente de la institución, para formar un ingeniero agrónomo de perfil amplio, capaz de dirigir integralmente los procesos productivos.

DESARROLLO

Actualmente se pretende enseñar desde la naturaleza, utilizándola como recurso educativo, hay que educar para mejorar y apreciar el medio ambiente, hay que presentar y aprender conductas correctas hacia el entorno, no solo conocerlo. Se trata de la concepción de la naturaleza no como fuente inagotable de recursos, sino como un ecosistema frágil que tiene sus propias exigencias que hay que respetar por nuestro propio interés y supervivencia. Por ello, y aunque sea de forma puntual, debemos tener en cuenta esta celebración, y realizar algún tipo de actividad especial para reforzar lo que tendría que ser un día a día en nuestra vida.

La Educación Ambiental pretende poner a la persona en relación con el medio ambiente en el que se tiene que desenvolver, de tal forma que la interacción que se establezca sea positiva…” (Jiménez, C, 1998).

El planteamiento anterior nos revela que está íntimamente relacionada la Educación que busca desarrollar la conciencia de los hombres en cuanto al cuidado de la (naturaleza ambiental) con aquella que busca desarrollar hábitos saludables y habilidades y facilita cambios voluntarios de conductas en el fomento de estilos de vida más saludables (para la salud).

La Educación Ambiental es difícil enmarcarla en una sola definición, básicamente por su carácter polisémico. Su ubicación en el contexto de la pedagogía contemporánea, no es sencilla, las propias definiciones estudiadas suelen denominarle: proceso, proceso educativo, proceso educativo permanente enfoque educativo, nueva dimensión del proceso educativo, disciplina integradora, enfoque educacional, práctica educativa, alternativa pedagógica.

Hoy se entiende, por algunos autores como un proceso positivo en términos de la prosperidad colectiva, cimentado en la necesidad de mejora, protección y conservación del medio ambiente, base de sustentación de la sociedad humana, y es definida recientemente, como un modelo teórico, metodológico y práctico, que trasciende el sistema educativo tradicionalista y alcanza la concepción de medio ambiente y de desarrollo.

Lo anterior significa, positiva interacción del ser humano con el medio ambiente y entre sí. Es una definición que se centra en la relación del hombre con la naturaleza; y desde ese punto de vista, todas las acciones humanitarias que se han realizado en el tiempo, desde el surgimiento del hombre, en función de un mejor trato entre los seres inteligentes del planeta, y de éstos con el medio ambiente, constituyen antecedentes indiscutibles de la Educación Ambiental.

Al estudiar los contenidos y las funciones de cada uno de estos aspectos, nos ubicamos en la Educación Ambiental como un nuevo componente de la educación integral, que influye mediante cada componente, en las propias acciones que capacitan intelectualmente a los educandos, que los forman científicamente, como aspecto importante de su educación moral, física, estética, y presente en la base político-ideológica, politécnica y laboral.

La Educación Ambiental es el concepto enlace entre la educación en su definición más amplia, la protección del medio ambiente y el desarrollo; es la propia educación integral con todos sus componentes, orientados hacia problemáticas, cuya verdadera magnitud se ha comenzado a comprender recientemente.

Los objetivos de la Educación Ambiental convergen en la consecución de un ser humano preparado para actuar sobre las problemáticas ambientales de su tiempo y satisfacer sus necesidades, lo que evita comprometer la calidad de la vida de las generaciones futuras; estos se promueven en los distintos subsistemas educacionales, mediante líneas directrices y programas directores en los planes de estudio, así como a partir de ideas rectoras sobre protección del medio ambiente y de la salud humana, relación organismo-ambiente, politecnización y otras. Los objetivos de Educación Ambiental, enmarcados dentro de los propósitos de la carta de Belgrado, se resumen en los siguientes:

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